Para una correcta visualización de las letras, te recomiendo instalar esta fuente.

Para ver mi otro blog, mis proyectos y divagues AQUI
Para hacer cualquier otra pregunta AQUI

martes, 14 de diciembre de 2010

Capítulo 13: ¿Cuál es las respuesta correcta?

Era un día extremadamente soleado. Era extraño considerando que entraban al invierno… lo sentía anti natural.

—Hola —saludó al ver a Christopher. Él le dirigió una mirada examinadora y abrió la boca, pero la cerró, como esperando que le dijera algo.

—¿Cómo te sientes? —preguntó cariñosamente.

—Normal —contestó tomando una botella de agua y comenzó a lanzarla por el aire distraídamente.

—¿Normal? —interrogó en un susurro. Ella lo observó, estaba raro, no le dio mucha importancia y se fue a trabajar.

Había muchos niños jugando en la calle, aquel barrio no se había caracterizado por los infantes, era un lugar muy tranquilo al ser una serie de edificios con apartamentos y sin jardines para jugar… Algo andaba mal, como si no fuera su mundo… Tal vez era un sueño.

Apretó los labios y siguió caminado, pero el cielo se oscureció y las calles se convirtieron en una serie de callejones con pasos resonantes tras ella, echó a correr con el corazón desbocado y el aire diciéndole que faltaba algo.

Abrió los ojos desmesuradamente cuando casi cae a un barranco, lo conocía. Su cerebro le decía que había algo familiar en la quietud y oscuridad de las olas.

—Ven conmigo —susurró el viento en su oído cuando una chica de cabello largo y ojos miel apareció frente a ella, sobre el mar. Dio un paso asustada, aunque no le parecía peligrosa.

—No puedo, me ahogaré —replicó rápida dando un traspié.

La chica le dirigió una mirada de profunda tristeza, el viento ondeó su vestido y escuchó como las olas chocaban contra las piedras. Un rugido vino desde atrás, una criatura horripilante. La sangre en sus venas se congeló y vio el mar con las rocas, la chica sobre el cielo aún mirándola.

—No temas —murmuró. Era fácil decirlo cuando ella estaba suspendida en el aire y el tiempo, quería gritarle que dejara de verla de esa forma. Le recordaba la mirada que tuvo hace años, le recordaba la mirada que muchas veces la vigiló en sueños…

Pasó sus ojos de uno a otro y se dejó caer con el viento silbando en sus oídos.



Esperaba un fuerte golpe al chocar contra el agua y luego ser arrastrada por las olas hacia las rocas, era lo que ocurría cuando caías por un barranco, lo sabía, aun así se lanzó. Pero no pasó eso, sino que algo completamente diferente y a lo que no estaba preparada. Su corazón dio un vuelco al sentir el pasto húmedo en su espalda… fresco… suave… tranquilizador…

Aunque la visión ante ella, una vez que se sentó, la dejó sin aliento, ¡era magnífico! Un campo de flores blancas, algo que nunca en su vida imaginó conocería, todo era tan hermoso que no podía creer lo que veía, no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa… Pero ante ella volvió a aparecer aquella chica y todos sus pensamientos se perdieron en esos ojos de enfrente.

—¿Qué es este lugar? —preguntó sin dejar de observar a todos lados. Aquello parecía sacado de un sueño.

La chica no contestó y se dirigió al bosque, con aquel andar sigiloso y delicado, gracioso y suave, parecía bailar entre los árboles o al menos eso quiso creer. Primero la siguió con la mirada, dudando si levantarse e ir tras ella, pero algo en su interior le decía que debía hacerlo, por su bien. Así que lo hizo a paso lento aunque decidido.

—Si te dijera qué es este lugar, no te ayudaría para nada, no importa. La pregunta es quién eres tú —contradijo.

La miró con gesto huraño, tenía el presentimiento de que la conocía, pero no sabía de dónde y lo que decía le recordaba a Erika, siempre con esas preguntas extrañas, enredándola. Frunció su ceño y se cruzó de brazos, ¡como si tuviera el tiempo de más para estarlo perdiendo con alguien que, al parecer, solo quería fastidiarla! Pateó el suelo como si fuera una niña mimada a la que no le quieren comprar su juguete y la observó fijamente.

—Hablas como mi hermana —replicó caminando.

—Tu hermana sabe quién es.

—¡Pues si sabes tanto, dime quién soy! —farfulló molesta de tanta palabrería.

—No puedo decirte, tienes que responderla —dijo finalmente antes de desaparecer y dejarla sola.

Abrió su boca con asombro, ni siquiera la dejó saber algo más, no entendía absolutamente nada. ¿Qué pasaba con su hermana? ¿Qué pasaba con ella? Apretó los puños con molestia y bajó la mirada… El lugar se borró antes sus ojos.



Despertó cuando tocaron su puerta. Christopher entró como si nada. Se sentía extrañamente cansada.

—Tu jefe llamó hace un rato, dije que estabas enferma —comentó sonriendo—. ¿Estás bien?

—Sí —contestó y se levantó, estaba lloviendo—. ¿Erika?

—Vinieron anoche por ella —respondió sabiendo a que se refería.

Ella no le habló de nada más y caminaba normal, le alegró que al menos los poderes de David funcionaran con ella, aún no comprendía por qué los suyos nunca le hacían caso, pero nada se podía hacer. Soltó un largo suspiro, quizás algunas cosas era mejor no saberlas.

Pensó en llamar a Erika y decirle que todo estaba bien, pero conociéndola ya debería saberlo todo.



Miraba el collar, la fotografía estaba vieja y gastada, además que era a blanco y negro. Lo cerró al sentir los pasos por el pasillo y lo guardó en el bolsillo.

—Hola, David —saludó alegremente su hermana.

—Hola —contestó desanimado, esperaba que fuera Jonathan.

David quería a su hermana, en algún lugar guardaba cariño hacia ella, pero estaba tan concentrado y sumido en sus cosas que se olvidó de su familia y su pasado. Dio un suspiro largo y a ella le pareció que envejeció por un instante. Se notaba cansado, aunque claro, sanar una persona no era tan fácil como decir un conjuro y ya, era mucho más complicado que uno de trasporte.

Mailen frunció el ceño, la verdad no sabía qué decirle, el paso de los años lo convirtieron en un extraño.

—Bien —dijo dudosa y se encerró en su habitación, mas eso fue peor luego de un rato. Tenía que ir a algún lado, no necesitaba estar en esa casa y la presencia de su hermano la ponía inquieta.

Tomó su bolso y salió del departamento, cualquier otro lugar era mejor que ése.

1 Plumas:

tres de tres dijo...

me a gustado mucho =)

un besooo ;)

 

Template para blogger por May Abiatti para Plumas Azules